La provocación supera todos los límites. La elección de Bennett, Mándalos y Baltakos es una patente muestra de lo que sucede en el fútbol griego.
Para el partido más importante de la temporada hasta ahora, eligen como árbitro a un eslovaco Ivan Kruzliak, el favorito de Lubos Michel, con todo lo que esto supone.
Un árbitro que en el partido Dínamo de Kiev-Olympiacós decidió la eliminación del Olympiacós, con la consiguiente protesta formal ante la UEFA.
Dejamos bien claro que no aceptamos dicha elección y que deben substituirlo inmediatamente.
A estas alturas todos ya saben que no estamos hablando de la incompetencia de Bennett, pues este es una marioneta de Mándalos o el que da la cara por Baltakos.
Se trata de una provocación clarísima y un plan de la banda criminal para atacar al Olympiacós.
